En un ambicioso movimiento que podría redefinir el liderazgo global en el desarrollo de la inteligencia artificial (IA), Arabia Saudita y a16z están considerando la creación de un fondo de inversión de 40.000 millones de dólares. Este fondo, que se espera se concrete en la segunda mitad del año, marcaría un hito en la inversión en tecnología, posicionando al reino como el principal inversor en el sector de la IA.
La iniciativa cuenta con el respaldo del Fondo de Inversión Pública de Arabia Saudita, que está en conversaciones con Andreessen Horowitz (a16z), la reconocida firma de capital de riesgo de Silicon Valley, para supervisar las inversiones en inteligencia artificial. Según informes del New York Times, la colaboración con a16z no solo fortalecería las capacidades de inversión del reino en IA, sino que también podría traducirse en la apertura de una oficina en Riad, ampliando la influencia de Arabia Saudita en el ámbito tecnológico global.
Ben Horowitz, uno de los fundadores de a16z y amigo del gobernador del fondo saudí, Yasir Al-Rumayyan, ha expresado su admiración por el enfoque innovador de Arabia Saudita, destacando al país como un emergente «país de startups». Este acercamiento entre ambas entidades subraya una estrategia común orientada a maximizar el impacto y el crecimiento en el floreciente sector de la IA.
El fondo propuesto no solo superaría con creces los esfuerzos de inversión actuales en el espacio de la IA, como el compromiso de Microsoft de 13.000 millones de dólares en OpenAI, sino que también señala un cambio en la dinámica de poder tecnológico a nivel mundial. Financiado a través del Fondo de Riqueza Soberana del reino, que cuenta con activos por valor de 900.000 millones de dólares, el fondo de IA buscará invertir en áreas críticas como la fabricación de chips y el desarrollo de grandes centros de datos, esenciales para el avance de la tecnología de IA.
Las ambiciones de Arabia Saudita no se detienen en la inversión; el reino también contempla la posibilidad de crear sus propias empresas de IA, lo que podría significar un avance significativo en su independencia tecnológica y en su posición como líder innovador en el escenario mundial.
La discusión sobre este fondo se produce en un momento de intensa actividad en el sector de la IA a nivel mundial, con Estados Unidos implementando nuevas medidas para garantizar la seguridad en el desarrollo de IA y líderes del sector como el CEO de OpenAI, Sam Altman, buscando inversiones significativas en la región del Golfo para el desarrollo de semiconductores avanzados.