La creciente popularidad del juego de blockchain play-to-earn «Hamster Kombat» ha atraído fuertes críticas de funcionarios del gobierno iraní y de sectores conservadores. Estos afirmaron que el sencillo juego de tapping play-to-earn es un instrumento de poder blando proyectado por las naciones occidentales. Habibollah Sayyari, el subjefe del ejército iraní, afirmó que el juego tenía como objetivo distraer a la población iraní de las próximas elecciones del país. Los comentarios de Sayyari fueron respaldados por la autoridad religiosa Ayatollah Nasser Makarem Shirazi, quien caracterizó todo el campo de las criptomonedas como plagado de fraudes.
Las críticas de los funcionarios iraníes no toman en cuenta la grave situación financiera en la que se encuentran muchos iraníes. El país está afectado por sanciones occidentales y una inflación desbordante, con una tasa de cambio actual de 1 dólar estadounidense por 580,000 riales iraníes. Estas condiciones económicas han sido un catalizador para el surgimiento de juegos de blockchain en países en desarrollo. El juego NFT Axie Infinity es un ejemplo de este fenómeno. En su apogeo, los jugadores de Axie reportaron ganar hasta USD 1,300 al mes jugando el juego, una fuente significativa de ingresos en países en desarrollo.
Aunque el costo de entrada para jugar a Axie era relativamente alto, los gremios organizados de juegos proporcionaron formas para que los jugadores en países en desarrollo compensaran los costos y obtuvieran ganancias significativas. Esta dinámica ha permitido que muchos jugadores encuentren en los juegos de blockchain una fuente de ingresos viable en medio de dificultades económicas.
A pesar del aumento de la tracción de los juegos Web3 en el mundo en desarrollo, los juegos de blockchain aún están rezagados detrás de los juegos tradicionales y distan mucho de lograr una adopción generalizada. Una encuesta reciente de OnePoll reveló que el 52% de los encuestados no tenían conocimiento alguno sobre los juegos de blockchain. Y otro 32% indicó que sabían de ellos pero nunca habían jugado ninguno. Estos números sugieren tanto un mercado potencial enorme como también reflejan problemas más amplios con los juegos de «jugar para ganar». Como la verdadera utilidad de los tokens y la falta de mecánicas de juego de calidad para competir con los juegos de consola y PC.