El Bitcoin es una criptomoneda que puede utilizarse para comprar cualquier bien o servicio en los lugares en los que se acepte este tipo de pago. No es física, sino que es una moneda digital libre y descentralizada que permite realizar transacciones sin necesidad de ningún tipo de intermediario.
Cuando decimos que es descentralizada, queremos decir que no existe una autoridad que controle o que sea responsable de su emisión y el registro de sus movimientos. El funcionamiento es básico, consiste en una clave criptográfica que se asocia a un monedero virtual, el cual descuenta y recibe pagos.
Ya estamos en 2022 y el Bitcoin es ya más que una realidad, pero todo empezó hace muchos años atrás. El 31 de octubre de 2008, Satoshi Nakamoto publicó el documento técnico de Bitcoin. En el que se describe en detalle cómo se podría implementar una moneda digital peer-to-peer.
Satoshi Nakamoto no se sabe si es una persona individual o un grupo de trabajo, además abandonó (o abandonaron) el proyecto a finales del 2010 sin revelar su identidad real.
En el documento técnico de Bitcoin propusieron utilizar un libro de contabilidad descentralizado de transacciones empaquetadas en lotes (llamados «bloques») y aseguradas por algoritmos criptográficos o blokchain como lo conocemos hoy en día.
Solo dos meses después, el 3 de enero de 2009. Nakamoto extrajo el primer bloque de la red Bitcoin, conocido como el bloque génesis. Lanzando así la primera criptomoneda del mundo.
Aunque Nakamoto fue el inventor original, a lo largo de los años un gran número de personas han contribuido a mejorar el software mediante la aplicación de parches, y la adición de nuevas características.
El archivo del código fuente de Bitcoin en GitHub lista más de 750 colaboradores, siendo algunos de los más importantes Wladimir J van der Laan, Marco Falke, Pieter Wuille, Gavin Andresen, Jonas Schnelli, entre otros.
Nunca podrás sostener un Bitcoin, pero en realidad este funciona como cualquier otra moneda clásica como el dólar, el euro o los yenes. Además, no disponen de número de serie o mecanismo para poder ser rastreado.
Aunque cabe destacar que el blockchain contiene toda esa información dentro del gran libro contable donde, de requerirse, puede ser rastreada la transacción. Lo que descarta el mito de que es totalmente anónima.
Al ser una moneda descentralizada no requiere de la confianza de un banco central. Así que se respalda en la propia comunidad que mediante el consenso de “Prueba de Trabajo” confirma cada transacción y la agrega a los bloques del blockchain. Debes tener claro que una vez confirmada, no se puede borrar ni hacer ningún tipo de devolución.
Los nuevos bitcoins se generan por un proceso descentralizado llamado «minería». Este proceso se basa en que los individuos son premiados por la red por sus servicios.
El proceso de minería de bitcoins es siempre el mismo, los mineros reciben un nuevo problema matemático cada diez minutos y el más rápido en resolverlo se lleva las nuevas monedas que se ponen en circulación. Este problema matemático se basa en cálculos aleatorios que tienen como objetivo encontrar la solución y así obtener la validación del bloque. Quien descifra esto se llevará la recompensa, siempre y cuando el resto de miembros de la red confirme que la respuesta es correcta.
El numero de bitcoins creados cada año se reduce a la mitad de forma automática a lo largo del tiempo hasta que la emisión de bitcoin se detenga por completo al llegar a los 21 millones de bitcoins. Esta concepción tiende a elevar el precio del bitcoin. A principios del 2021, la emisión de bitcoins ha superado las 18 millones de unidades.
Bitcoin es una moneda especial, con unas características específicas que han servido de modelo para todas las otras criptomonedas existentes, aunque con algunas diferencias:
La blockchain consiste en un conjunto de tecnologías que permiten llevar un registro seguro, descentralizado y sincronizado de todas las operaciones digitales que se realicen, sin la necesidad de terceros.
La que para nosotros es la mejor definición es la dada por Don & Alex Tapscott en su libro Blockchain Revolution: “es un libro de contabilidad digital incorruptible de transacciones económicas que se puede programar para registrar no solo transacciones financieras, sino prácticamente todo lo que tiene valor».
Pero, ¿Cuáles son las funciones de la tecnología blockchain?. Eso es sencillo, cumplir la función de registrar, conservar y proteger la información de cualquier tipo de operación digital, sin intervención de terceros.
Es decir, operar como una base de datos compartida y continuamente actualizada. Facilitando el intercambio de activos y la gestión de contratos inteligentes
La Blockchain por tanto puede usarse en un sin número de industrias, y no solo en tareas de intercambio de dinero. El registro contable, la trazabilidad de productos en la cadena de suministro, la gestión de historias clínicas y de identidad, planes de fidelización, contratos y la resolución de controversias son algunas de ellas.