Con la llegada del mundo de las criptomonedas se han abierto nuevas e interesantes opciones económicas. La tecnología blockchain y el mundo de los criptoactivos promete un futuro con enormes posibilidades. Aunque por supuesto, no todo iba a ser bueno, y es que, las estafas en el mundo cripto llevan siendo algo habitual desde prácticamente el inicio de esta nueva moda. Aquí ya os hablamos de varios tipos de estafas, aunque últimamente se ha popularizado el crypto-hacking.
El llamado “crypto-hacking” es el uso de dispositivos pertenecientes a otras personas, sin consentimiento, para minar y extraer criptomonedas que las víctimas tengan guardadas en sus wallets. Con el crypto-hacking un intruso puede apoderarse de navegadores web, así como comprometer todo tipo de dispositivos, desde ordenadores de escritorio y portátiles hasta teléfonos inteligentes e incluso servidores de red.
Unos 78 hackeos se registraron en los primeros 6 meses de este 2022. De los cuales cerca de 1,300 millones de dólares se obtuvieron a través de la blockchain, esto supuso un incremento en los delitos con respecto al mismo periodo del año pasado en un 136%. Estas cifras no parece que vayan a descender, por lo que los inversores y usuarios cripto deben estar atentos a algunas señales de alarma.
“Aunque actualmente el mercado busca constantemente promover la seguridad de los usuarios, a través de métodos como la verificación de identidad o los códigos QR, nadie está exento de sufrir este tipo de hackeo. Por lo tanto, es importante estar atento a los signos inusuales que pueden estar presentes en la computadora. Aunque muchas empresas han revelado su vulnerabilidad a este tipo de pirateo, la expansión del mercado de criptomonedas continúa. A su vez, Brasil ocupa el primer lugar en América Latina con el mayor número de ataques cibernéticos, según un informe publicado por la empresa especializada en Threat Intelligence, SonicWall. Sin embargo, en un sector que no se detiene, lo que se busca es promover en el usuario el uso de sistemas informáticos capaces de brindar una gran seguridad a los datos e informaciones sensibles que representan un mayor nivel de importancia para el público”, comentó Eduardo Borba, presidente por Softline Brasil.
Este cripto-hacking es necesario para conseguir dinero, que irá destinado a otro tipo de ataques. Los hackers quieren ir cada vez un paso más allá, y conseguir hacerse con hardware más importante.
Por ejemplo, hace poco unos hackers piratearon la red de tecnología operativa del sistema de control de una empresa pública de agua europea. Por suerte la empresa se dio cuenta cuando instaló productos de detección de intrusos en la red de la empresa en su red interna que no está expuesta a internet.
Los intrusos que utilizan crypto-hacking usan un proceso muy similar a los ataques malware. Y es que pueden acceder a información confidencial a través de emails o enlaces entre otros métodos. Esto hace que sea muy complicado de detectar.
Por otro lado, descubrir la fuente del uso de la CPU puede ser complejo. Estos procesos se pueden ocultar o enmascarar como legítimos utilizando los nombres propios del sistema para evitar que los usuarios los interrumpan.
Actualmente vivimos en un mundo de constante cambio, dónde los hackers tienen múltiples formas de hacer sus robos. Por ello, si inviertes en este tipo de cosas debes tener claro que mantenerse a salvo de los peligros como la piratería informática, es de vital importancia. Ten siempre en cuenta que tienes que conseguir los medios necesarios para detectar y limpiar cualquier tipo de intrusión y proteger todos los recursos de enorme valor que tengas.