Security Alliance, liderada por el jefe de seguridad de Paradigm, presenta una innovadora iniciativa destinada a apoyar a los hackers éticos en la lucha contra el crimen en el ámbito de las criptomonedas. Esta organización sin fines de lucro, registrada en Estados Unidos, busca brindar respaldo a los expertos en seguridad digital capaces de recuperar fondos de explotadores maliciosos.
La comunidad cripto celebra el lanzamiento de Security Alliance, una entidad que reúne a un equipo de especialistas en seguridad blockchain, encabezados por samczsun, responsable de seguridad de la firma de capital de riesgo cripto, Paradigm. Este nuevo proyecto, revelado el 14 de febrero, tiene como objetivo principal proporcionar asistencia y protección legal a los hackers éticos que deseen colaborar en la detección y recuperación de fondos en riesgo.
Security Alliance ya ha puesto en marcha tres proyectos principales. Ofrece una línea directa para solicitar ayuda en temas de seguridad, así como un componente de juegos de guerra destinado a preparar a los desarrolladores para enfrentar los desafíos de seguridad en el entorno cripto. Sin embargo, la iniciativa más destacada es su Acuerdo de Refugio Seguro Whitehat, el cual garantiza protección legal y recompensas para aquellos whitehats que ayuden a recuperar fondos bajo explotación activa.
La inspiración detrás de Security Alliance proviene del hackeo sufrido por Nomad en agosto de 2022. Muchos hackers white hat colaboraron en la recuperación de los fondos, pero la falta de un marco legal claro limitó su participación. Esto llevó a la creación de esta organización, con el objetivo de brindar un entorno seguro y legal para la acción de los hackers éticos.
Security Alliance cuenta con más de 50 donantes y socios, entre los cuales se encuentran la Ethereum Foundation, Vitalik Buterin, a16zcrypto, Paradigm, Electric Capital y Coinbase. Se estima que el grupo ha recaudado más de USD 1 millón, con una contribución de USD 500,000 por parte de Buterin. Este respaldo financiero es crucial en un contexto donde las pérdidas por hacks y estafas en el mundo de las criptomonedas alcanzaron los USD 2.61 mil millones en 2023, con pocas recuperaciones. La constante evolución de las tecnologías de hacking hace imperativa la acción coordinada de la comunidad de seguridad digital.