La compañía de prestamos BlockFi pidió este lunes la protección de la Ley de Quiebras de Estados Unidos. Tras la caída de FTX sigue su camino y declara la enésima bancarrota del sector en este año 2022.
BlockFi es una plataforma de préstamos de criptomonedas nacida allá por 2017. Ahora, tras varios años en activo, se ha declarado en bancarrota a principios de semana. Y no solo ha afectado a BlockFi, 8 de sus filiales también han caído.
A través del siguiente comunicado de prensa, la empresa declaró que esta solicitud de bancarrota responde a un contexto de reestructuración. Ya que deben proceder a las querellas legales de los fondos comprometidos por el desastre de FTX. Mientras esto se resuelve, pretenden que la empresa siga activa, amparados bajo el Capítulo 11 de la propia ley.
Además, desde BlockFi aclararon que aún disponen de unos 256 millones en activos líquidos que serán destinados a la reestructuración. Desde la empresa, esperan ansiosos la inyección de capital, tanto para cumplir con sus acreedores como para pagar los salarios de los empleados.
Los clientes de la plataforma no pueden, desde el pasado 11 de noviembre, retirar ninguno de sus fondos, ya que fueron inhabilitados. Por lo que está en el aire lo que le pasará a los ahorros e inversiones de los clientes que confiaron en la empresa. La empresa no aclaró qué sucederá con los fondos de sus clientes, tomando en cuenta que, desde el 11 de noviembre, la plataforma inhabilitó los retiros.
El caos en la situación de Blockfi se veía venir de lejos. Y es que, la plataforma tení una estrechísima relación con FTX. Es más, FTX rescató hace unos meses a BlockFi, que pasaba por una durísima crisis financiera y recibieron una inyección de capital de 400 millones. Esta ayuda significó que FTX se convirtiera en el principal acreedor de la empresa.
Por eso, tras la estrepitosa y sorpresiva caída de FTX, siendo esta misma quien inyectaba capital a BlockFi, la empresa ya se esperaba lo peor. Por eso, la decisión de declararse en bancarrota, era casi una obviedad.
Según esta Ley de Quiebras de Estados Unidos, se les permite a las empresas declararse en bancarrota como medida de protección ante los acreedores. Pero, todos los activos de la empresa comenzarán a pertenecer a un tribunal asignado, que se encargará de administrarlos. Por lo que, si eres un afectado, ten claro que puede pasar muchísimo tempo hasta que consigas ver tus fondos perdidos de nuevo.